En un lejano lugar, una pequeña aldea de Africa, una niña le dio a su maestra un regalo de cumpleaños.
Se trataba de un hermoso caracol.
- ¿Dónde lo encontraste?- le preguntó la maestra.
La niña le dijo que esos caracoles se encontraban solamente en una playa determinada.
La maestra, que sabía donde se encontraba aquella la playa, se conmovió profundamente, porque sabía que la niña había caminado muchos kilómetros para buscar el caracol.
- Muchas gracias. Pero ¡ no debiste haber ido tan lejos sólo para buscarme un regalo... !
La sabia niña sonrió y le contestó:
- Maestra, la larga caminata es también parte del regalo.
Fuente: Los cuentos que yo cuento
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