Si somos conscientes de cómo funcionan los riñones, podemos contribuir a mantenerlos sanos.
¿Qué son los Riñones?
Podríamos decir que son filtros de purificación de la sangre.
Son dos órganos, en forma de guisante, del tamaño aproximado de un puño, con una longitud aproxima de 11,25 centímetros. Están situados en la espalda, en la región lumbar, a cada lado de la columna vertebral, encima de la cintura, protegidos por las costillas.
¿Qué funciones realizan?
1.-Eliminan los residuos de la sangre. Los residuos proceden de las células del organismo y de los alimentos que ingerimos. Cada día los riñones filtran, aproximadamente, 190 litros de sangre, eliminando casi dos litros, en forma de orina, que son enviados a la vejiga, donde permanecen, hasta ser expulsados.
2.-Mantienen en equilibrio el contenido de agua del organismo. Además de filtrar las impurezas de la sangre, el riñón secreta la orina y regula el contenido de sal y de agua en el organismo.
3.-Ayudan a mantener las sustancias químicas del organismo en equilibrio. Los riñones regulan el sodio, el fósforo y el potasio, manteniendo su nivel adecuado en el cuerpo.
Además, los riñones liberan tres hormonas importantes:
Eritropoyetina, que estimula la producción de glóbulos rojos mediante la médula ósea.
Renina, que regula la presión arterial
Calcitrol, la forma activa de la vitamina D, que ayuda a mantener el calcio para los huesos y para el equilibrio químico normal en el cuerpo
La Medicina Tradicional China añade que los riñones almacenan el jing (la esencia vital) y controlan el crecimiento, el desarrollo humano, la reproducción. Generan la médula, llenan el cerebro, controlan los huesos, transforman la sangre, controlan los líquidos y reciben y controlan el Chi de los pulmones.
Los oídos y el pelo están relacionados directamente con los riñones. Se dice, en medicina china, que “ los riñones se abren en el oído” y “se manifiestan en el pelo”( un pelo sano y brillante manifiesta unos riñones sanos).
Se cree que los riñones son la raíz de la vida. Los Riñones alojan la voluntad y controlan el miedo. La baja autoestima y la timidez son síntomas de deficiente funcionamiento de los riñones.
EJERCICIOS CURATIVOS :
Ejercicio 1. Envío de energía.
Busca un lugar tranquilo y silencioso. Siéntate en postura de meditación, con piernas cruzadas, o bien en un banquito de meditación, en una silla con la espalda erguida, o de pie en postura wu chi (ver Aquí). Cierra los ojos y haz un ejercicio de relajación y de armonización de cuerpo y mente. Una vez sintonizada tu mente con tu cuerpo, entra en sintonía con la naturaleza, con el chi cósmico
1.-Centra tu atención en tus Riñones.
Sonríeles, internamente, y agradéceles las funciones que desarrollan en tu cuerpo, animándolos a curarse (si estuvieran enfermos) y a seguir cumpliendo con su cometido.
2.-Frota las palmas de las manos y colócalas sobre los riñones (en la espalda, por encima de la cintura).
a) Imagina una corriente de energía que sale de tus manos y se introduce en tus riñones, durante unos tres minutos. (no estés pendiente del reloj, mejor cuenta unas doce respiraciones, si te ayuda).
b) Visualiza ahora, durante otros tres minutos, cómo tus riñones captan la energía curativa que viene, a través de tus manos, y cómo se van regenerando, cargándose de chi, de energía vital.
3.-Visualiza tus Riñones sanos, potentes, filtrando la sangre, controlando los líquidos de tu cuerpo, fortaleciendo tu voluntad y haciendo crecer tu autoestima.
Ejercicio 2. Sonido curativo
El médico chino Sun Si Miao, en el siglo VII de nuestra era, expuso la teoría de los 6 sonidos curativos. Cada uno de nuestros órganos vibra a una determinada frecuencia, por lo que, emitiendo determinados sonidos, podemos sanarlo, al equilibrar su energía ying yang, con la vibración emitida.
Uno de los sonidos, con cuya vibración sintonizan los Riñones, es Chu...güe... iiiii....
De pie, en postura wu chi (ver Aquí), con los brazos relajados en los costados, relájate. Armoniza tu corazón y calma tu mente.
1.- Centra tu atención en tus Riñones. Agradéceles las funciones que realizan para ti. Sonríeles, internamente.
2.- Inclina hacia adelante tu cabeza, seguida de tu espalda, vertebra a vertebra, dejando que los brazos caigan, relajados, en dirección al suelo, mientras vas expulsando el aire, arqueando tu espalda, hasta tu inclinación máxima, sin hacer esfuerzo por llegar a tocar el suelo. A continuación, tras dos segundos de pausa una vez expulsado el aire, al tiempo que se inicia tu inspiración, ve incorporándote, vertebra a vertebra, durante el tiempo que dure tu inspiración, y, una vez erguido, deposita las palmas de tus manos sobre tus riñones, y continúa el movimiento hacia atrás, al tiempo que emites, mientras espiras, el sonido Chu...güe...iiiii..... (Al expulsar el aire, expulsa también los sentimientos de temor, timidez, ansiedades y desconfianza en ti mismo, asociados a tus Riñones, y que tanto los dañan). Al terminar la espiración, incorpórate y baja los brazos a los costados.
3.- En esta posición de reposo, durante el tiempo aproximado de tres respiraciones reposadas, sonríe, internamente, a tus riñones, al tiempo que los envuelves en una luz azul oscura. Y envíale sentimientos de valentía, fuerza y autoestima.
(El ejercicio se repite durante durante 3, 6 o 9 veces, con su correspondiente intervalo, si lo haces en plan preventivo. Si tienes diagnósticada alguna alteración de tus riñones, debes hacerlo 9 veces, mínimo, mejor 36, para conseguir su curación
El sonido no es necesario que sea externo. Debe dirigirse hacia tus riñones, para que reciban la vibración.
Cuando estés en un lugar en donde no puedas hacer el ejercicio con los brazos, (guardando turno para pagar en un comercio, con tu coche en un atasco o en una sala de espera, por ejemplo), haz el ejercicio, sin movimiento, emitiendo el sonido, de forma subvocal, para ti, para tus riñones).
VIDEO de EJERCICOS:
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