LAS ALERGIAS


¿Qué son las alergias?

Una alergia es una respuesta desmesurada del sistema inmunológico ante una sustancia que en principio es inofensiva, pero que nuestro organismo trata como extraña y potencialmente peligrosa. Al sentirse amenazado, nuestro sistema inmunológico trata de protegerse poniendo en marcha un dispositivo a gran escala que libera sustancias como la histamina en el torrente sanguíneo. La histamina es una sustancia química que tienen algunas de nuestra células y que al liberarse produce los síntomas propios de la alergia: estornudos, moqueo, tos, picor, etc.

Cada día hay más alérgicos


Hace algunos años, aproximadamente tres de cada diez personas sufrían algún tipo de alergia pero, a la vista del vertiginoso aumento que se ha producido en los países más industrializados, algunos expertos aseguran que, en pocos años, el 50% de la población sufrirá los indeseables efectos de las alergias.

Para actuar frente a las alergias tenemos dos posibilidades. Por un lado, tenemos la medicina convencional cuyos tratamientos farmacológicos consisten principalmente en antihistamínicos, antiinflamatorios y cortisona; elementos paliativos que no curan las alergias sino que se limitan a eliminar o reducir los síntomas. Estos medicamentos que actúan exclusivamente sobre los síntomas, lo hacen inhibiendo la respuesta normal del sistema inmunológico e introducen toxinas dentro del organismo, empeorando todavía más la situación a largo plazo.

Por otro lado, el tratamiento natural de las alergias tiene dos objetivos muy claros: establecer las causas, que casi siempre son un conjunto de factores, y proporcionar al organismo los elementos necesarios para restablecerse.




1. Dieta para el tratamiento natural de las alergias


Como hemos visto, las alergias son “fallos” del sistema inmunológico y debemos considerar, siguiendo el planteamiento naturista, que tienen su origen en un desequilibrio de nuestro organismo muchas veces causado por una alimentación deficiente o inadecuada. Para que una sustancia alergénica desencadene una reacción inmunológica, antes debe haber penetrado en nuestro organismo. Esto puede suceder de varias formas, como a través de la piel, los pulmones etc. Pero la más frecuente suele ser a través del sistema digestivo. En los intestinos es donde se absorben los nutrientes, de manera que resulta imprescindible mantener las mucosas intestinales en buen estado para evitar que penetren sustancias extrañas que puedan sensibilizarnos. 

Alimentos Aconsejados:

*Ácidos grasos poliinsaturados. Los obtenemos a través de aceites vegetales de primera presión en frío (como los de oliva, borraja, onagra, lino, etc) y semillas (como las de lino, calabaza, girasol, sésamo o chiia, entre otras) y son fundamentales en numerosos procesos fisiológicos del organismo, como proteger las membranas celulares.

*Alimentos depurativos como la alcachofa o el apio, que ayudan a eliminar del organismo las sustancias de deshecho, algo necesario para fortalecer el sistema inmunológico.

*Abundantes vegetales y hortalizas crudos. Una dieta rica en ensaladas de frutas, vegetales y verduras crudas y ecológicas, así como batidos o zumos, también ayuda a depurar el organismo en profundidad, a estimular las defensas y, con ello, a reducir los síntomas de las alergias.

*Alimentos ricos en fibra, como cereales integrales (sobre todo arroz, trigo sarraceno y quinoa) y legumbres(lenteja, garbanzo, soja, azukis).

*Elementos macrobióticos. También te sugerimos que consumas habitualmente algunos elementos de la cocina macrobiótica recomendados para equilibrar el pH del organismo y el sistema inmunológico, como el miso o el gomasio.
Prebióticos y probióticos como el yogur, el kefir, la levadura de cerveza, la fibra, etc.

Alimentos desaconsejados:

*Azúcar y edulcorantes sintéticos (como la sacarina y el aspartamo), todo tipo de bollería industrial o artesanal, chocolate y frutas como plátanos o higos.

*Productos procesados desnaturalizados (en lata, en sobre, en paquetes, en bolsas, congelados, precocinados, congelados, etc.), ya que no nos aportan enzimas ni nutrientes y en cambio contienen numerosos aditivos alimentarios, responsables de muchos problemas de salud en los países más industrializados.

*Alimentos fritos y grasas saturadas. Para ello, reduce también al mínimo la carne animal y, cuando la consumas, procura que sea de procedencia ecológica.

*Leche de vaca. La leche de vaca contiene caseína, una proteína que actúa como antígeno y que, como señalan voces expertas, tiene un impacto negativo en la salud. La leche es uno de los alimentos más alergénicos y, al contrario de lo que creemos, descalcifica los huesos ya que acidifica el sistema y, en compensación, el organismo toma el calcio de los huesos para alcalinizarse. En consecuencia, los países donde se consume más cantidad de leche son los que más casos de osteoporosis presentan.

*Gluten. Junto con la leche, en caso de alergias conviene evitar los alimentos con gluten (entre ellos el pan). Para ello, sustituye el trigo en tu dieta por arroz integral o trigo sarraceno, dos de los cereales que, según numerosas publicaciones, son los que menos alteraciones genéticas han sufrido con el paso de los años.

*Bebida alcohólicas o bebidas industriales, tipo cola, energéticas, etc.



(Ver más en Vivenaturalia sobre procedimientos naturistas que pueden ayudar a superar las alergias como  Fitoterapia, Medicina Ortomolecular y Flores de Bach...)


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