AGUA Y LIMÓN, EN AYUNAS


Comienza bien tu día, tomando agua y limón

Empezar el día hidratando y desintoxicando el organismo, antes de tomar cualquier alimento es la mejor forma para mantenerse sano. Probablemente la mayoría de las personas, al levantarse se toma una pieza de fruta o el muesli con leche o zumo directamente. Peor, un café. O peor aún, no desayuna nada.

Agua templada, en ayunas. Sería  muy bueno que decidiesemos cambiar nuestros  hábitos y comienzasemos bien el día, tomando, en ayunas, un vaso de agua templada (o a temperatura ambiente, pero nunca fría). Esto es para volver a hidratar el organismo después de toda una noche en la que no has tomado líquidos. Durante la noche, incluso cuando no te despiertas sudando, como puede pasar en verano, el cuerpo pierde bastante agua en los procesos de regeneración de tejidos. Hay que volver a rehidratarlo nada más levantarte.

Tomando agua en ayunas también ayuda a activar tu metabolismo, elimina las toxinas acumuladas por la orina y evita el estreñimiento, problema muy habitual en nuestra sociedad. Hay personas que creen que beber agua en ayunas quema grasa y ayuda a adelgazar. Esto es un mito. Para quemar grasa hay que quemar más calorías de las que ingieras así que allí juegan un importante papel la dieta y el ejercicio físico. Un metabolismo activo sin embargo sí ayuda a quemar las calorías que ingerimos durante el día.

Limón con agua templada. Media hora más tarde, tomas otro vaso de agua templada con el  zumo de medio limón. También puedes usar un limón entero, pero quizás al principio cuesta acostumbrarte al gusto ácido. Tu cuerpo, y en especial tu hígado te lo agradecerá. Media hora más tarde ya puedes comer. 
Si no tienes tiempo por la mañana para esperar una hora antes de tomarte el desayuno, opta sólo por el vaso de agua con limón y deja el primer vaso de agua para los fines de semana cuando dispones de más tiempo.

El limón es un cítrico rico en vitamina C, depura el organismo, remineraliza y estimula sobre todo el hígado y el páncreas. Después de unas semanas bebiendo agua con limón notarás como también se mejorará el aspecto de tu piel (por eliminar mejor las toxinas). Por eso el limón es un remedio natural contra el acné y los puntos negros.

2 Consejos

Si bebéis agua con limón a menudo, es mejor tomarla con una caña, para que el ácido cítrico entre en contacto directo con los dientes  y  evitar el desgaste del esmalte dental.

En general, es recomendable tomarte todas las bebidas a temperatura ambiental o templadas  porque las bebidas frías (y alimentos fríos, como helados por ejemplo) enfrían tus órganos y eso ralentiza la digestión.

Fuente: Nueva Vida Natural


EL JARDIN DE LA VIDA





Había, una vez, en algún lugar, que podría ser cualquier lugar, y en un tiempo, que podría ser cualquier tiempo, un hermoso jardín, con manzanos, naranjos, perales y bellísimos rosales, todos ellos felices y satisfechos. Todo era alegría en el jardín, excepto por un árbol profundamente triste. El pobre tenía un problema: no sabía quién era.
  
Lo que le faltaba era concentración, le decía el manzano: 
-Si realmente lo intentas, podrás tener sabrosas manzanas. ¿Ves qué fácil es? 
-No lo escuches -decía el rosal-, es más sencillo tener rosas y, ¿ves que bellas son? 
Y el árbol, desesperado, intentaba todo lo que le sugerían y, como no lograba ser como los demás, se sentía cada vez más frustrado. 

Un día, llegó hasta el jardín el búho, la más sabia de las aves, y, al ver la desesperación del árbol, exclamó:
-No te preocupes, tu problema no es tan grave, es el mismo de muchísimos seres sobre la tierra. Yo te daré la solución: no dediques tu vida a ser como los demás quieran que seas... Sé tu mismo, conócete, y, para lograrlo, escucha tu voz interior. 

Y dicho esto, el búho desapareció. 

-¿Mi voz interior... ? ¿Ser yo mismo... ? ¿Conocerme... ? -se preguntaba el árbol desesperado-. 

De pronto, comprendió... Y, cerrando los ojos y los oídos, abrió el corazón y, por fin, pudo escuchar su voz interior diciéndole: 

-Tú jamás darás manzanas, porque no eres un manzano; ni florecerás, cada primavera, porque no eres un rosal. Eres un roble, y tu destino es crecer grande y majestuoso. Dar cobijo a las aves, sombra a los viajeros, belleza al paisaje... Tienes una misión. Cúmplela. 

Y el árbol se sintió fuerte y seguro de sí mismo y se dispuso a ser todo aquello para lo cual estaba destinado. Así, pronto llenó su espacio y fue admirado y respetado por todos. 

Y sólo entonces el jardín fue completamente feliz. 


¡Cuántos serán robles que no se permiten a sí mismos crecer! 
¡Cuántos serán rosales que, por miedo al reto, sólo dan espinas! 
¡Cuántos naranjos que no saben florecer! 
En la vida, todos tenemos un destino que cumplir, un espacio que llenar.

Fuente: Planeta Azul

FRECUENCIA VIBRACIONAL

Una vibración es una onda en un segundo y la cantidad de vibraciones en un segundo es la frecuencia. Nuestros órganos de los sentidos tienen limitaciones que les impiden percibir la mayoría de las vibraciones que existen en la Naturaleza.

La Naturaleza no admite el vacío. Einstein llegó a la conclusión de que el espacio que nos rodea no está vacío sino ocupado por partículas bipolares invisibles al ojo humano, debido a su alta vibración (energía sutil). Estas partículas responden funcionalmente a las energías espaciales tales como las que ya conocemos: la nuclear, los rayos X, los ultravioletas, los infrarrojos y otras que aún quedan por descubrir.
Los fotones corresponden a la energía lumínica y son visibles al ojo humano.
Las frecuencias de vibración iguales se neutralizan. Cuando son diferentes se desarrollan sistemas de adaptación, para solucionar las diferencias. 

Los seres vivos están compuestos por elementos que integran un conjunto; dichos elementos tienen que compartir la misma frecuencia vibratoria o ser capaces de producir sistemas de adaptación. Si el proceso de adaptación fallara o la resistencia individual fuera baja, se producirían lesiones en los tejidos biológicos. La salud en todas las formas de vida depende de la neutralización armónica y el equilibrio de todos los elementos vibratorios. Los fenómenos de "simpatía" con el ambiente, estudiados en Física, ocurren por frecuencia de vibración. Estos fenómenos son extensivos al comportamiento humano y a sus relaciones afectivas.

El cuerpo humano está integrado por millones de células que funcionan por tener polo positivo y polo negativo, formando un campo electromagnético. Las vibraciones de sus tejidos le dan una identidad individual, cuya impronta es percibida como única. La suma de vibraciones de los tejidos biológicos se transmiten por medio de la piel constituyendo una red o malla, que un operador entrenado puede "leer" por medio del tacto sutil. Esta red que circunda al cuerpo físico se denomina campo electromagnético, plasma biológico o aura. En caso de producirse una modificación en el equilibrio vibratorio, la persona estará en riesgo de perder su estado de salud.

Fuente: El Místico

LA OPINIÓN DE LOS DEMÁS.Cuento Sufí


Un viejo y un joven viajaban con un asno. Al llegar a la aldea caminando junto al animal, los niños de la escuela rieron al verlos pasar diciendo: 

-Mira esos tontos, tienen un asno robusto y van caminando, por lo menos el viejo podría montarse en él.

Al escuchar a los niños, los hombres pensaron que deberían de seguir el consejo, pues pronto llegarían a otra población y la gente se volvería a reír de ellos. Así pues, el viejo se montó en el burro y el joven caminó detrás.
Entonces encontraron un grupo de gente que los miro y dijo: 
-¡Mirad! El hombre viejo montado en el burro y el pobre muchacho caminando. 

Así que cambiaron puestos, el hombre viejo camino y el joven montó en el burro. 
Entonces otro grupo de gente se acercó y dijo: 
-¡Mira que muchacho más arrogante! Quizás el viejo es su padre o su maestro, y va caminando mientras el joven va montado en el burro. Esto es contrario a toda norma.

Ahora, ¿qué podían hacer? Ambos decidieron probar la única posibilidad restante: sentarse los dos en el burro. Así que montaron ambos en él.
Entonces otro grupo se acercó y dijo: 
-¡Mirad qué gente tan violenta! El pobre burro está casi muerto, mejor sería que lo cargaran ellos en sus hombros.

Así que otra vez lo discutieron y decidieron llevar al burro en hombros, pues de otra manera la gente de la aldea vecina los llamaría tontos. Por lo tanto, cortaron un bambú, colgaron al burro de las patas y lo cargaron. El pobre animal trato de rebelarse -como cualquier burro lo haría- y trato de escapar, pues no era un fanático de la sociedad, no creía en la opinión de los otros. Pero los dos hombres estaban empeñados y lo forzaron, así que el burro se doblegó.
Precisamente cruzaron el puente para llegar a la aldea cuando una multitud se reunió en derredor suyo y exclamó: 
-¡Mirad a esos tontos! Jamás existieron idiotas semejantes, en vez de montar el burro lo llevan a cuestas. ¿Se habrán vuelto locos?

El burro mientras tanto se puso inquieto, tan inquieto que saltó y se cayó desde el puente al rió, matándose enseguida. Ambos bajaron al rió y junto al animal muerto el hombre viejo habló al muchacho, pues ésta no es una historia ordinaria, el viejo era un maestro Sufí, y el joven su discípulo
El viejo dijo: 

-Mira, así como el burro, tú estarás muerto si escuchas demasiado la opinión de los demás. No te preocupes de los demás, pues ellos son muchos y tienen su propia mente, por lo que dirán siempre cosas diferentes. Si continúas escuchando a otros y no escuchas tu propio centro intimo, serás llevado de un lado para otro. Escucha tu voz interior, siéntela y muévete de acuerdo a ella.


Fuente: Planeta Azul

ANTIGUA BENDICIÓN CELTA


“Que los PIES te lleven por el camino hacia el encuentro de quien eres, porque la felicidad,…es eso,….descubrirte detrás de ti…sabiendo que el verdadero disfrute está en transitar ese camino.

Que los OJOS reconozcan la diferencia entre un colibrí y el vuelo que lo sostiene. Aunque se detenga, seguirá siendo un colibrí, y es importante que lo sepas, para que no confundas el sol con la luz, ni el cielo con la voz que lo nombra.


Que las MANOS se tiendan generosas en el dar y agradecidas en el recibir, y que su gesto más frecuente sea la caricia para reconfortar a los que te rodean.


Que el OÍDO sea tan fiel a la hora de escuchar el pedido, como a la hora de escuchar el halago, para que puedas mantener el equilibrio en cualquier circunstancia….y sepas escucharte y escuchar


Que las RODILLAS te sostengan con firmeza a la altura de tus sueños y se aflojen mansamente cuando llegue el tiempo del descanso.


Que la ESPALDA sea tu mejor soporte y no lleves en ella la carga más pesada.


Que la BOCA refleje la sonrisa que hay adentro, para que sea una ventana del alma


Que los DIENTES te sirvan para aprovechar mejor el alimento, y no para conseguir la tajada más grande en desmedro de los otros.


Que la LENGUA exprese de modo tal las palabras que puedas ser fiel a tu corazón en ellas, conservando el respeto y la dulzura.


Que la PIEL te sirva de puente y no de valla.


Que el PELO le de abrigo a tus ideas, que siempre adornan más que un buen peinado.


Que los BRAZOS sean la cuna de los abrazos y no camisa de fuerza para nadie.


Que el CORAZÓN toque su música con amor, para que tu vida sea un paso del Universo hacia adelante.”

LA ACEPTACIÓN DE NOSOTROS MISMOS




"...Bien, la manera de empezar (a cambiar las cosas) es estando dispuestos a sentir lo que nos está ocurriendo. Se empieza estando dispuesto a mantener una relación compasiva con las artes de nosotros mismos que no consideramos dignas de vivir en este mundo. Si durante la meditación estamos dispuestos a poner atención no sólo en lo que percibimos como confortable sino también en cómo se siente aquello que nos resulta doloroso, con sólo que aspiremos a permanecer despiertos y abiertos a lo que estamos sintiendo, a reconocerlo y admitirlo tanto como podamos en cada momento, entonces algo comienza a cambiar.

La acción compasiva, el estar ahí para los demás, el ser capaz de actuar y hablar de una manera comunicativa, se inicia viendo en nosotros en qué momento comenzamos a calificarnos como buenos o malos. En ese momento particular es posible contemplar simplemente el hecho de que hay una alternativa más amplia para cualquiera de esos dos extremos, que hay un lugar más sensible y trémulo donde es posible residir. Este lugar, si podemos llegar a tocarlo, nos ayudará a adiestrarnos durante toda nuestra vida a abrirnos cada vez más a cualquier cosa que sintamos, a abrirnos más en vez de cerrarnos más. Descubriremos entonces que, a medida que nos comprometemos con esta práctica, a medida que desarrollamos un sentido de celebración de aquellos aspectos nuestros que anteriormente hallábamos tan imposibles de aceptar, algo cambia dentro de nosotros.

Nuestras antiguas pautas habituales comenzarán a suavizarse y empezaremos a ver los rostros y a escuchar las palabras de las personas que nos hablan. Si comenzamos a entrar en contacto bondadoso con lo que sea que estemos sintiendo, nuestros caparazones protectores se disolverán y hallaremos que podemos trabajar con más áreas de nuestras vidas. Según aprendemos a tener más compasión por nosotros mismos, el círculo de compasión por los demás —con qué o quiénes podemos trabajar, y de qué modo— se amplía."

Pema Chödron "Cuando todo se derrumba"

EL ALACRAN

 

Había, una vez,  un maestro oriental  que estaba contemplando las aguas de un riachuelo y  vió como un alacran se estaba ahogando. Decidió sacarlo del agua y, al ahcerlo, el alacrán le picó.  Por la reacción al dolor, el maestro lo soltó, y el animal cayó de nuevo al agua.  El maestro intentó sacarlo otra vez, y otra vez el alacrán le picó. 



Alguien que había observado todo, se acercó al maestro y le dijo:

  "Perdone, pero  ¡usted es terco ! ¿No entiende que, cada vez que intente sacarlo del agua, le picará?". 

El maestro respondió:

   "La naturaleza del alacrán es picar, y eso no va a cambiar la mía, que es ayudar". 

Entonces, ayudándose de una hoja, el maestro sacó al animalito del agua y le salvó la vida. 


No cambies tu naturaleza, si alguien te hace daño; sólo toma precauciones. 

(Autor desconocido)



Tu estás aquí, por mi. Y yo, por ti.



Cuéntase que, en una ocasión, Nasrudín caminaba tranquilamente por el campo, un día soleado. Mientras miraba el paisaje, observó que, delante de él, otra persona también caminaba en la misma dirección. En cierto momento, éste miró hacia atrás y vio a Nasrudín a cierta distancia. Entonces, pensó: seguramente es un atracador y está esperando la oportunidad para quitármelo todo. En ese momento, empezó a correr despavorido.
Nasrudín que lo observaba desde atrás con atención, al verlo correr de esa forma, pensó: seguramente le ha pasado algo y necesita ayuda, y entonces él también empezó a correr a toda velocidad. De esta forma los dos corrían, por el campo, uno tras otro. 

El primer hombre ya no podía más y, en su debilidad, tropezó con una piedra, rodó por el suelo y quedó medio atrapado entre unos matorrales. Se quedó allí quieto y agazapado, con la esperanza de que Nasrudín no le viera cuando pasara. Pero Nasrudín tropezó justo en la misma piedra, rodó igualmente y fue a parar justo encima del hombre. Éste gritaba:
-Por favor no me hagas nada.

Nasrudín quedó sorprendido, se quedó mirando a la otra persona y dijo:
-¿Sabes qué? Creo que tú estás aquí, por mí,y yo estoy aquí, por ti.

"SI LE SONRÍES A LA VIDA, LA VIDA TE DEVUELVE SONRISAS"





Entrevista a Oliver Bouyssi,  realizada por Víctor M Amela, en La Vanguardia


Cuántas veces ha entrado en un quirófano?
Perdí la cuenta hace mucho.

¿Cuánto tiempo lleva en tratamientos médico?
¡Años enteros! Desde hace 24 años, cuando el accidente: iba en moto... y un coche me arrolló. Siete costillas rotas, los dos fémures rotos, el cráneo roto y los pulmones encharcados en sangre.

Para haberse matado.
Me trasladaban al hospital y casi muero: no podía respirar. Pensé en lo que sé de buceo.

¿A qué se refiere?
Conservé la calma y me concentré en el mínimo oxígeno que captaba. Y resistí. Pero a los pocos meses, recibí el mazazo.

¿Qué mazazo?
"Tiene sida", me diagnosticaron. Infectado en una transfusión de alguna de las cirugías.

Lo que faltaba.
Y era a finales de los años ochenta, cuando el sida era letal. Mi sistema inmunitario se hundía. Sentí que me quedaba poco tiempo.

¿Y qué hizo?
Mi sueño era vivir en el Caribe. Y me fui. Sin casi nada, en una cabaña, fui feliz. Y me enamoré de una chica, Mylene.

Y la enfermedad, ¿qué?
Cuando me sentí peor, regresamos. Mantuvimos el sida a raya, pero llegó otro revés.

¿Qué?
¡Cáncer! Tres cánceres. Primero, un cáncer de sangre. Segundo un cáncer de recto. Me operaron, no quise la bolsita: fue un año de dolores cada vez que iba al retrete...

Y tercero.
Un cáncer de pene.

Dios santo.
Radiologías, largas quimioterapias, cirugías en pene e ingles... Me quitaron piel de la pantorrilla para trasplantarla...

¡Usted ha sufrido lo indecible!
¡Súmeles tres infartos, por los fármacos!

¿Cómo se puede vivir así?
Los fármacos antisida mermaron mi serotonina y padecí una depresión profunda. Saber la causa me ha ayudado a afrontarla... Y, contra todo pronóstico, ¡soy feliz!

Ya me explicará el secreto.
Adoro a mi madre, ¡y sé que ella sufriría horriblemente si me viese morir!

O sea, que usted sobrevive por amor.
Eso ayuda mucho. Tres veces he estado a punto de morir en la UVI, y las tres he pensado: "¡Mejoraré, seguro, voy a seguir aquí!"

Aconseje al que esté en un hospital.
Sé paciente, y ya verás como retomas pronto las riendas de tu vida. Dime, ¿qué miras cuando tomas una curva con tu coche? ¿El morro del coche o la salida de la curva?

La salida de la curva.
¡Pues haz igual en todo lo demás!

¿Cómo está ahora?
Este año ha sido el primero sin dolencias.

¿Le ha enseñado algo el sufrimiento?
El dolor es inevitable, el sufrimiento es opcional. El dolor te obliga a enfrentarte a ti mismo. Y yo decidí, en vez de compadecerme y sufrir... ¡sonreír!

Difícil.
No me lo invento, ¡prueba!: sonríe, y la vida te devolverá sonrisas. ¡La vida es un espejo!

¿Puedo elegir la felicidad, pues?
Sí, puedes entrenarla, como una gimnasia.

Recéteme tres ejercicios de felicidad.
Uno: cada día reserva quince minutos para ti y revísate, como un capitán a su barco.

Dos.
Hay cuatro emociones que te visitan a diario: miedo, odio, inferioridad, culpabilidad. Visualiza cuatro marcadores... ¡y vigila que sus indicadores no se disparen!

¿Qué conseguiré?
Ser el capitán de tu barco: tener un ánimo estable, ¡suceda lo que suceda!

¿Y el tercer ejercicio?
Captura fotos mentales de cosas buenas y, antes de dormirte, revísalas y atesóralas.

¿Fotos?
Esta mañana tomaba un café en una terraza, ha pasado una pareja, se han besado tiernamente... Observándoles, he participado de esa ternura. Esta noche atesoraré esto.

Otra foto.
Después de semanas de aislamiento esterilizado por la quimio, pasé a planta... ¡y vi una mosca en la habitación! ¡Una mosca!

¿Y?
Sentí que esa mosca que revoloteaba era la vida, la vida que volvía a recibirme. La mosca se me posó en la pierna. ¡Qué gran foto!

Pequeñas cosas.
Que no son tan pequeñas.

Ante una adversidad de la vida, ¿no piensa "por qué a mí"?
Soy marino, navego: cuando una tormenta se desata en alta mar... jamás piensas "¿por qué a mí?" No. Sólo actúas... hasta que la tormenta ha pasado.

Pero lo del pene... ¡Buf!
A mis amigos les dije: "Van a quitarme cuatro centímetros... pero como Dios fue tan generoso conmigo, ¡no es problema!"

Qué buen humor.
En vez de llorar, nos reímos. Recuerda: tu capital eres tú. No te subestimes. Cultívate, échate al camino de la felicidad y camina.

Y cuando su madre muera, ¿qué?
Viviré por mis amigos: viviré porque no quiero darles un disgusto.

Fuente: La Contra de La Vanguardia